Compuestos bio y miel multifloral: sabor y bienestar natural

Fontana Bio es la empresa familiar de Erica Fontana, arquitecta de formación y cultivadora por pasión. Tiene su sede en las orillas del Adige, cerca de Pescantina: y es de aquí, en la naturaleza inmaculada, de donde provienen los duraznos orgánicos utilizados para las conservas y mermeladas Fontana Bio.

Pero hay más: las nuevas delicias, fruto de la ingenio y las manos hábiles de Erica, que ha ideado las recetas exclusivas y cuidado la preparación artesanal, están ahora disponibles en nuestro sitio: se va desde la compota de duraznos orgánicos con jarabe de agave, sencilla y sabrosa, hasta la original compota de peladillas y melisa, pasando por la divertida receta de compota de peladillas, enriquecida con palitos de almendra y grappa orgánica.
Estas compotas son todas preparadas con el especial procedimiento de secado en frío: una novedad para los productos Fontana Bio, un proceso que no contempla la adición de azúcares, para regalar a los consumidores una experiencia de sabor y bienestar natural al 100%.

Entre las novedades contamos también con los duraznos en almíbar de azúcar de caña, un gran clásico del mundo de las conservas; las peras en almíbar con vino, especiadas y preparadas en la inusual variante de vino blanco; la compota de manzanas, cáscaras de naranja caramelizadas y canela y la variante más rústica, sin las manzanas; la compota de limones y manzanas, un equilibrio de frescura y sabores, la de pomelo y peras, que une el amargor del pomelo con la dulzura de una fruta como la pera; la compota de naranjas orgánicas y la de naranjas y jengibre, ideal para el bienestar y la energía de los desayunos invernales, hasta llegar a la compota de manzanas y uvas pasas, un pedazo de tradición para degustar sobre pan en las noches más frías.

Todas las compotas presentan la fruta en trozos, no contienen pectina ni conservantes y son ideales para el relleno de dulces y tartas. ¿Un consejo para apreciarlas aún más? Descúbralas en combinación con los salados: desde las carnes blancas a los quesos curados, desde la masa frita hasta los camarones salteados.
Una combinación que te sorprenderá, estamos seguros.
 

¿Por qué elegir la miel mil flores de Sicilia de Giampiero Lombardo?
 

Porque es producida por una empresa que tiene sede y orígenes entre las cretas rojas de las colinas de San Cataldo, en la provincia de Caltanissetta. Una miel que nace de la pasión: por la apicultura, por la naturaleza y por su propia tierra, bañada por el sol y atravesada por paisajes inmaculados.

La Miel Mil Flores de Sicilia Lombardo es una miel cruda, no pasteurizada, de calidad superior: una de las mil flores con el sabor más intenso y característico en todo el mercado nacional, porque conserva, en cada envase, las extraordinarias particularidades de un producto que no necesita ningún aditivo.

Debe su aroma único a una flor en particular: la blanca de la zanahoria silvestre que crece entre los prados de las colinas de San Cataldo. Su sabor afrutado y floral oculta un toque de salinidad, en un equilibrio de sensaciones que completan la experiencia de degustación.

Se trata de una miel aclamada por los pasteleros, que se utiliza para las mejores preparaciones dulces, pero que es perfecta también así, untada simplemente sobre pan, tanto en el desayuno como en la merienda. Rica en propiedades nutritivas, organolépticas y terapéuticas, la miel brinda energía y vitalidad si se consume por la mañana, regala bienestar y calor si se disfruta por la noche con una infusión, y estimula el paladar si se acompaña con los mejores quesos curados y azulados.
 

Entonces, ¿por qué elegir la miel mil flores de Sicilia de Giampiero Lombardo?
Porque, simplemente, es una miel que cuenta la historia de una tierra y un amor visceral, con toda la genuinidad de un producto artesanal.
Tarrin tras tarro.

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