Para despertar el vino después de su reposo, ¡hazlo sin hacer demasiado ruido! Muchas veces en los restaurantes, te sirven el vino espumoso descorchándolo con un estallido, pero eso no es lo correcto, y ciertamente no es refinado. Es aún más problemático si el vino está particularmente envejecido. Permanecer en la botella durante mucho tiempo significa que se ha creado un equilibrio que preserva la calidad de todos sus componentes, y cuando se lleva a la luz nuevamente, no debe hacerse de manera brusca. Esto es especialmente importante para los vinos espumosos, aunque pueda parecer una delicadeza excesiva.
Como sabrás, el vino espumoso suele tener una presión interna de aproximadamente 6 atmósferas, lo que garantiza un buen perlage y una hermosa luminosidad en la copa. Si lo hacemos estallar con un fuerte ruido, una parte excesiva del CO2 se pierde, y por lo tanto, el vino pierde algo de su presión. De hecho, es posible que hayas visto en algunos restaurantes de prestigio al sumiller guiando cuidadosamente el corcho. No es solo para no molestar a otros clientes, sino para evitar estropear el vino que entrará en tu copa.
Esto es válido durante todo el año... excepto en Año Nuevo o si eres un campeón de Fórmula 1.
Te recomendamos que visites la página de nuestros vinos espumosos... y cuando decidas abrir uno, sabrás cómo comportarte.
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