Hacia Vinitaly 2018: nuestros vinos de moda.

¿Cómo se puede definir un vino trendy? En otras palabras, podríamos llamarlo a la moda, un vino que sabe rasguñar el mercado y el deseo de quienes compran, por toda una serie de valores añadidos que muchas veces no corresponden necesariamente a la calidad intrínseca del producto.

Todo esto ha sucedido desde que el vino ha pasado de ser un alimento puro a un producto hedonista, de placer y, en muchos casos, también de lujo. Esta metamorfosis del vino en los últimos treinta años ha aumentado considerablemente el valor del producto y, sobre todo, ha alimentado la búsqueda de calidad. En algunos casos, ciertos vinos desconocidos se han convertido en verdaderos pilares de la enología italiana: desde los Supertuscans hasta el Amarone de la Valpolicella, un vino considerado de serie B hasta finales de los años ochenta.

Con ocasión de la edición de Vinitaly 2018 que se celebrará en Verona del 15 al 18 de este mes, veamos juntos cuáles son los vinos que continúan determinando el mercado italiano e internacional. Además, también señalaremos algún vino de nuestro portal.

Consideremos ante todo que la tipología de compra de los italianos ha cambiado muchísimo en los últimos años y, ahora, quien manda en el mundo de la venta de vino es cada vez más la GDO. El 2017, además, vio un aumento del 40% en las ventas en el sector biológico. La gran distribución vendió alrededor de 2 mil millones de euros en vino en 2017. En la GDO, los más vendidos son el Lambrusco, el Chianti y el Montepulciano d’Abruzzo entre los tintos, y el Vermentino y el Muller Thurgau entre los blancos. Como se puede ver, faltan muchísimos vinos que conocemos como de calidad y que para muchos aún son inalcanzables. Pero se trata de la gran distribución, por lo que es un target de acceso muy popular. Esto, sin embargo, nos da una idea de la elección de los italianos. También hay vinos emergentes como, por ejemplo, el Grillo de Sicilia, la Ribolla y el Valpolicella Ripasso.

Entre los vinos más vendidos en el mundo del HoReCa, sin embargo, siguen en los primeros puestos el Prosecco, la galaxia Valpolicella y, en particular, Ripasso y Amarone, la producción etnea en Sicilia, los grandes vinos toscanos con un incremento también de etiquetas como Morellino y Chianti Classico. Los Piemonteses están volviendo a levantarse después de años de incertidumbre y vuelven a conquistar enotecas y restaurantes italianos.

Nuestro carnet de vinos "a la moda"

Sobre la base de estos datos, también Spaghetti & Mandolino puede dar su opinión: tenemos, de hecho, en nuestro carnet vinos de gran contemporaneidad y calidad buscada. La lógica de la venta online no es la de la GDO y, poco, la del HoReCa. Se busca, de hecho, conquistar a los clientes con el relato del territorio, de las personas, de las técnicas productivas, de la versatilidad en la mesa, de la calidad y placidez del vino y su fuerza expresiva emocional. Es por eso que a veces se encuentran bodegas desconocidas, pero de gran valor. Muchas veces son empresas que no venden a la GDO y que se dirigen a mercados restringidos en Italia porque producen cantidades limitadas debido a disponibilidades limitadas. ¡Pero en la calidad no se transige!

Nuestro Lambrusco proviene de las tierras de Castelvetro y, en particular, de la Tenuta Pederzana. Una propiedad que ha hecho de la búsqueda de los clones antiguos de este vino una de sus misiones. Sus vinos son densos, agradables, de gran calidad, fineza y elegancia. Los Lambrusco son emocionantes incluso en las versiones más simples. Desde el Puntamora, al Gibe dei Giovani, hasta el Cantolibero, sin sulfitos: se pueden captar todas las cualidades de una tierra extraordinaria y de un vino que, desafortunadamente, muchas veces es maltratado por técnicas productivas masivas poco valorativas.

Nuestra galaxia Valpolicella ha querido desde el principio confiar en productos de alta calidad con una búsqueda particular de empresas y de territorios fuertemente caracterizantes. Una bodega que representa bien este concepto de búsqueda y de rareza es NeposVillae, una pequeña realidad enclavada entre los más bellos viñedos de la Valpolicella Clásica en Negrar, un viñedo en la contrada Villa, de donde surge uno de los cru más interesantes de toda la vallata. Los productos son todos identitarios, elegantes sin forzamientos enológicos, en pleno respeto de la antigua técnica productiva de esta área. Un Amarone Campo di Villa que, aunque joven, tiene perspectivas de longevidad muy interesantes y un gran equilibrio gustativo.

Otro producto es el de la bodega Le Bertarole en el valle de Fumane, también en Valpolicella Clásica. Un producto Bio con una excelente relación calidad-precio, cereza y refinado. Por último, para llegar a la Valpolicella Oriental DOC, aquí está el toque inconfundible de un joven talento como Marco Mosconi y sus vinos de calidad.

Si hablamos de Muller Thurgau, hemos incluido un gran exponente de la tipología en Alto Adige. La bodega de Klaus Lentsch se encuentra en el Valle de Isarco y ofrece vinos de gran potencia gustativa y de excelente bebibilidad. Un equilibrio alcanzado solo gracias a viñas situadas en posición heroica en un valle excelentemente ventilado sobre rocas marnosas y porfiricas.

Elegir un Chianti que no esté ya fuertemente posicionado también en la GDO no es fácil, especialmente con una óptica de búsqueda y de rareza como hemos establecido en nuestra bodega. Pero nosotros nos hemos concentrado en el territorio de Rufina, quizás un poco desconocido para la mayoría, y sin embargo tan significativo y valioso. Un territorio que se encuentra al noreste de la ciudad de Florencia y continúa por la vía que lleva a las tierras aretinas de Poppi. Un viñedo situado en un valle encantador donde viñas, olivos y cipreses son el leitmotiv de un panorama impresionante. Aquí se encuentra Villa di Vetrice con una propiedad muy extensa de 560 hectáreas, de las cuales 160 cultivadas con viñas. En sus Chianti se encuentra toda la sinceridad de esta tierra y la fuerte identidad del sangiovese toscano.

Nuestro Piemonte se ha detenido en Morro d’Alba, un pueblo extraordinario agarrado a la cima de una colina que se extiende por toda su grandeza entre viñas y nogales. Aquí se encuentran grandes viticultores que han hecho la historia de la enología italiana y langarola. Nos hemos detenido en Rocche Costamagna, una realidad de calidad donde Alessandro Locatelli desarrolla y alimenta la idea de vino iniciada hace 170 años por los fundadores. Extraordinarios sus Dolcetto d’Alba y el gran Barolo Rocche Annunziata, nombre que ha hecho historia del rey de las Langhe.

Bernardo Pasquali

S&M