El verano ha terminado y con él ha pasado la ganas de sandía y granita. Con la llegada del otoño empezamos a buscar sabores que calienten, como la tarta de nueces, suave y fragante, ideal para el desayuno pero también excelente como postre después de la cena. La tarta de nueces es un dulce que seguramente te conquistará, ligero y delicioso, perfecto para quienes aman los frutos secos. La tarta de nueces forma parte de la pastelería clásica italiana, pero puede ser reinterpretada también con recetas originales. Descubre cómo hacerla junto a nosotros.
La primera cosa que deberás tener para hacer una tarta de nueces, naturalmente son las nueces, preferiblemente de excelente calidad. Como las nueces Lara de Eraclea que puedes encontrar en Spaghetti y Mandolino. Las nueces son suministradas por Sa.Ma. y provienen de Venecia, más precisamente de Eraclea y son recogidas de la Tenuta La Spiga. En este rincón de campo del Véneto oriental cerca del mar, en un contexto paisajístico aún virgen a un paso de la laguna de Caorle, la tenencia produce y recoge nueces de primerísima calidad. Se trata de una variedad muy particular: se llama Lara y tienen un sabor más delicado y dulce en comparación con otras tipos de nuez.
Ahora aquí están los ingredientes:
130 g de nueces peladas
80 g de harina 00
100 g de mantequilla
100 g de azúcar
2 cucharaditas de levadura para repostería
2 huevos medianos
La primera cosa que hay que hacer para preparar la tarta suave de nueces es pelar las nueces y picarlas finamente, luego agregar 30 gramos de azúcar. Ahora, toma el azúcar restante y mézclalo con la mantequilla hasta crear una mezcla cremosa. Luego añade los huevos y la mezcla picada y, por último, la harina y la levadura, trabajando todo hasta que la mezcla esté espumosa y libre de grumos. Vierte la preparación en un molde de al menos 20 centímetros de diámetro bien engrasado y hornea a 180 °C durante al menos 40 minutos. Cuando la tarta de nueces tenga un bonito color dorado estará lista, ahora solo te queda sacarla del horno y espolvorearla con azúcar glas.
Ahora que sabes cómo hacer la tarta de nueces ha llegado el momento de dar rienda suelta a la fantasía. A partir de este dulce simple pero delicioso se pueden hacer numerosas variantes muy sabrosas. Por ejemplo, ¿por qué no concederte una buena tarta de nueces con chocolate? Quizás el de Modica que puedes encontrar en el portal de Spaghetti y Mandolino, así como el chocolate fundente producido por Domori.
Si buscas algo más ligero, entonces puedes intentar hacer la tarta de nueces sin mantequilla, utilizando en su lugar aceite. El sabor será diferente pero igualmente muy sabroso.
Otro tipo de tarta de nueces muy apreciada es la de la abuela, suave y deliciosa como las que nuestras abuelas nos preparaban cuando éramos pequeños.
Pero las variantes no terminan aquí: también hay tarta de nueces y ricotta o con miel o, ¿por qué no?, manzanas y almendras. En resumen, existen una infinidad de recetas para probar y descubrir cuál es la favorita.
Entre las numerosas variedades de tarta de nueces hay algunas muy famosas. Es el caso de la tarta de nueces engadinesa, dulce típico del cantón suizo de los Grisones. Un delicioso cofre de masa quebrada que encierra un relleno de nueces y caramelo con Nata. Simplemente perfecta para una pausa por la tarde con una taza de té o café, esta tarta de nueces es ideal para servir como postre. Otro dulce conocido es la tarta deliciosa de Grenoble, un verdadero paraíso para los amantes de los frutos secos. Este dulce es muy simple: un cascarón de masa quebrada encierra un relleno goloso de nueces y caramelo. Perfecta para los primeros días de otoño, excelente en invierno, especialmente si te la conceder después de una larga caminata o en un momento en que necesitas recargar energías.
En este punto, solo te queda elegir la receta de tarta de nueces que más te convenga y ponerte a trabajar.
Francesco Scuderi
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