¡Taaaac! Lombardia no es solo Milán, toda la región atrae.

¡Ehh testina! ¡No solo hay Milán!
Está bien que Milán es la capital de la región y tiene muchas virtudes como ciudad, pero en Lombardía hay otras 11 provincias, y una cantidad infinita de productos originarios del territorio lombardo.
Nada quita a las otras regiones, Italia es un país maravilloso también por este motivo. Cada región, provincia y municipio de Italia se enorgullece de sus propios productos típicos y artesanales... y nosotros de Spaghetti&Mandolino los tenemos todos!
Modestia aparte, centrémonos en la Lombardía.

El viaje del bon vivant en Lombardía

Dado que por ahora no podemos hacerlo físicamente, te haré viajar con la mente a través del territorio lombardo! Para seguridad, lleva una canasta de picnic, o una de esas mochilas de viaje atadas a un palo, como en los mejores dibujos animados. Te lo digo porque veremos tantas cosas para comer que luego querrás hacer acopio.

Empecemos con una adivinanza: ¿cuál es ese queso tan bueno, cremoso y con vetas verdes? Esta era fácil. Estoy hablando, por supuesto, del Gorgonzola! Nuestro viaje comienza con él. Un producto único, cuya producción hoy está localizada en una zona muy amplia de Lombardía, que abarca las provincias de Bérgamo, Brescia, Como, Cremona, Lecco, Lodi, Milán, Monza, Pavía y Varese. Este queso es realmente antiguo, de hecho parece que nació en la localidad homónima a las puertas de Milán en el año 879, aunque quizás no era exactamente el mismo que saboreamos hoy. Tuvo una lenta difusión, pero luego tuvo éxito también a nivel internacional a principios de 1900. ¿Estás listo para pasar a otro producto o ya tienes hambre? En este segundo caso, podrías probar el cremoso Gorgonzola DOP dulce a cuchara de nuestra selección.

Después de esta visita inicial, podemos pasar a los productos que nacen justo en la capital de Lombardía. Es cierto, dije que Lombardía no significa solo Milán, pero demos a César lo que es de César. ¡En Milán nace el panettone! Este dulce (si no lo has entendido, estamos hablando del panettone) ya está presente en todas las mesas en Navidad, y es precisamente en Navidad que según la leyenda fue creado por primera vez! La historia más famosa narra que el panettone habría nacido en la corte de Ludovico María Sforza, llamado el Moro, señor de Milán en el lejano siglo XV.
Volvamos un momento atrás en el tiempo e imaginemos la escena: es Nochebuena, el cocinero oficial de la familia Sforza recibe el encargo de preparar un banquete suntuoso digno de nota, pero accidentalmente quema el dulce que había preparado para la ocasión (si tienes una ferviente imaginación, puedes escuchar también lo que dice). En medio de la locura, entra en escena Toni, el ayudante que trabaja en la cocina, quien para remediarlo decide usar un trozo de levadura que había reservado para Navidad y mezclarlo con lo que quedaba en la despensa de la corte, es decir, harina, huevos, uvas pasas, frutas confitadas y azúcar. Así obtiene una masa particularmente esponjosa. El cocinero, exhausto, no tiene más opciones que llevar a la mesa este dulce improvisado, después de lo cual se esconde tras una cortina para espiar la reacción de los comensales.
¡Sorpresa! Todos están entusiasmados y Ludovico el Moro quiere conocer el nombre de esa delicia, así que el cocinero revela el secreto: "¡Es 'l pan del Toni!". Desde entonces es el "pan de Toni", es decir, el panettone. Obviamente no hay fuentes seguras que puedan confirmar lo que dice la leyenda, pero es una historia muy divertida.

Además del panettone, Milán se enorgullece de otros productos como la Colomba o el Salame Milano.

Ahora trasladémonos hacia el este, para ingresar a las tierras comprendidas entre Lecco y Bérgamo, donde se encuentra la Val Taleggio. ¡Y quién sabe qué queso nace en este valle encantado! ¿Cómo adivinaste? El Taleggio DOP es un queso de pasta blanda, también con orígenes muy antiguos.
No menos es el raro Pannerone di Lodi, una verdadera especialidad protegida por el Presidio Slow Food desde 2003. Se distingue de otros quesos italianos porque no se somete a ningún tratamiento de salmuera y por las altas temperaturas de maduración. Su nombre proviene de "panèra", que en dialecto lodigiano significa crema de leche, nata, dado el uso exclusivo de leche entera rica en nata, por supuesto.

Abre la canasta y pon un poco de Bresaola della Valtellina, que es el producto de excelencia de la provincia de Sondrio.

Ahora trasladémonos al Lago de Garda para respirar un poco de aire fresco, en particular en Tremosine en el corazón palpitante del Parque Alto Garda Bresciano, donde la tradición lombarda se concentra en la Formaggella di Tremosine. Este queso es semigraso, de corta o media maduración y de pasta semidura: ¡un festival de sabores, de locura! Absolutely worth trying.
Quedémonos un poco más en Brescia para saborear otro queso, el típico Bagoss producido dentro del área de Bagolino, en las montañas brescianas, caracterizado por su color amarillo vivo debido a la presencia de azafrán en la pasta. Si hablamos de Brescia, no puedo dejar de mencionar dos vinos famosos, o mejor dicho, famosísimos, que no necesitan presentación: el Franciacorta y el Lugana.

Para concluir este viaje aventurero en busca de la tradición lombarda, es necesario adentrarse en la punta sudoriental de la región, ¡la provincia de Mantua! Mantova es la provincia donde más que nunca los productos están impregnados de la tradición campesina y tienen influencias de las regiones vecinas, en particular de Emilia-Romaña.
La top 5 mantovana está constituida por: Lambrusco, el vino tinto espumoso que junto a los ciccioli frolli es la combinación ganadora para el aperitivo mantovano; la Sbrisolona, el típico pastel que no se corta, ¡sino que se rompe con un puño y se empapa con grappa!
La Mostarda Mantovana de manzanas cotogne es excepcional si se combina con quesos curados de pasta granulosa.
Finalmente, último pero no menos importante, tenemos el salamino cacciatore, que debe su nombre a la antigua tradición de los cazadores que llevaban en la bag de estas pequeñas raciones ricas en sabor y super energéticas. ¿Y tú, quieres llevarte un salamino cacciatore en la mochila?

¡Y taaaaac, aquí estamos al final del viaje lombardo! ¿Te he convencido? Creo que te he dado suficiente material para demostrarte que cada provincia de esta región, en su unicidad, tiene productos peculiares y al mismo tiempo tradicionales. Ahora que tu mochila de viaje imaginaria está llena, ¡puedes darte gusto con el carrito de Spaghetti&Mandolino! ¡Buen viaje!

Sara Bettoni