La Manna de los dioses: sustancia bíblica con beneficios.

La citación bíblica del Éxodo "maná del cielo" hace referencia al largo periodo de nomadismo del pueblo hebreo en el desierto, huyendo de la esclavitud impuesta por el faraón egipcio Ramsés II.

El maná es un alimento históricamente definido como divino, anunciado por Dios con la promesa hecha a Moisés, para mantener con vida a los exiliados durante cuarenta años. La expresión "maná que desciende del cielo" en el arte figurativo implica una conexión entre Dios y el hombre.

En las Sagradas Escrituras, este alimento dulce que se derrite al sol con sabor a pan de miel, tiene una calidad nutritiva mística, conectada con lo divino y cambia de sabor según su consumo.

El maná es la savia extraída de la corteza de algunas especies de plantas del género fresno. Gracias a su particularidad y rareza, el maná se ha convertido en un presidio Slow Food, y su recolección está sujeta a un reglamento para garantizar su calidad y procedencia certificada.
 

Maná: historia y orígenes

El maná es un alimento antiguo bíblico y según el XVI libro del Éxodo, su nombre deriva de "Mân Hu" que significa "¿qué es esto?". Esta expresión representa el asombro de los hebreos al ver llover un alimento desconocido del cielo, enviado por su Dios en el desierto para alimentarlos.

Los griegos y romanos lo conocían con el nombre de "miel de rocío" o "secreción de las estrellas" por su carácter milagroso. El maná es un derivado de la planta fassino y en su tiempo era muy común.

Se recogía en diversas zonas de Italia como Sicilia, Calabria, Gargano, Beneventano, Molise, Lazio, en los bosques de Tolfa y en la Maremma toscana. Era una práctica familiar que luego fue sustituida por la producción de mannitol sintético.
 

Maná: cultivo y beneficios

¿Cómo se presenta el maná? El maná se presenta en forma de estalactitas ligeras y esponjosas y es un edulcorante natural bajo en glucosa y fructosa.

Hoy en día, se produce exclusivamente en Sicilia en el territorio de Castelbuono, Pollina, donde también se encuentra el Museo del Maná, Cefalù y alrededores. El maná se extrae del árbol del fresno, que al ser incisa con el "cutièddu â manna", deja que goteen hilos de algodón pegados a filamentos de resina violeta, que al contacto con el aire y el sol se solidifican, creando estalactitas blanquecinas.

El período de recolección ocurre durante el verano, alrededor de mediados de julio, cuando el fresno alcanza la concentración adecuada de azúcares para la cristalización.

El maná es un exudado azucarado que consiste principalmente en manitole, ácidos orgánicos, agua, glucosa, fructosa, mucílagos, resinas y compuestos nitrogenados. Su composición es muy compleja y está fuertemente influenciada por la zona de procedencia, el clima, las características físico-químicas del suelo, la edad de las plantas y el comportamiento estacional.

Este producto cuenta con muchas propiedades beneficiosas también en el ámbito farmacéutico y cosmético. Se utiliza también para aliviar diversas problemáticas como, por ejemplo, para combatir problemas de estreñimiento o como laxante (tanto en la infancia como en la adultez). También es perfecto como emoliente para pieles sensibles, atenuando las arrugas del envejecimiento.
 

Maná: usos y combinaciones en la cocina

Los usos en la cocina son variados. Una de las principales creaciones en cocina con el maná es el pan dulce, endulzado precisamente con el maná y preparado con harina, agua, aceite, leche y levadura. Se obtiene un pastel muy sencillo pero capaz de concentrar en sí milenios de historia y fascinantes tradiciones.

Hacia los años ochenta fue redescubierto en el ámbito de la pastelería, gracias a productos célebres como el Mannetto, el panettone de maná de los hermanos Fiasconaro, pero también se ha incluido entre las cremas, turrones y como fórmula para otros postres.

Puede ser combinado con chocolate negro, aprovechando su capacidad de suavizar la acidez natural del cacao. En algunos restaurantes de Castelbuono se ha incluido en el menú como acompañamiento al solomillo de cerdo negro en costra de maná, almendras y pistachos.

Otra manera de consumirlo para resaltar sus sabores y beneficios es crear una solución en pureza, tanto como jarabe como amargo digestivo.

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