El arroz Basmati tiene un origen indo-pakistaní, como también lo atestigua su nombre: la palabra, de hecho, tiene una raíz etimológica sánscrita y significa “empapado de aroma”, lo que indica el sabor fresco y fragante de este cereal de grano alargado.
A pesar de que existen numerosas variedades, solo una veintena de ellas mantienen las características que lo convierten en un arroz verdaderamente único por sus propiedades organolépticas y nutricionales: además de no pasarse, de hecho, el Basmati tiene un índice glucémico mucho más bajo que sus “colegas”, lo que lo hace más fácil de incluir en dietas particulares.
Si por lo tanto están buscando una variedad de arroz cuyos granos permanezcan separados, nada pegajosos y particularmente fragantes, el Basmati es sin ninguna duda el producto en el que deben fijarse. Echa un vistazo a las mejores tipologías de arroz.
Como se expone en una publicación realizada por el Indian Agricultural Research Institute de Nueva Delhi, los orígenes de la cultivación y el consumo de arroz entre India y Pakistán se remontan a un periodo histórico preario, de los cuales tenemos testimonios arqueológicos y una mención atestiguada por el Atharva-Veda, un texto sagrado que data de 1500 a.C. Como especie, además, parece haber emergido hace 8.000 años, en el norte de India.
Para ser cultivado, el Basmati requiere una humedad del 70-80% y una temperatura que oscile entre 25-35°C: parámetros óptimos que permiten mejorar cualitativamente las cosechas, junto con la selección de las variantes correctas. Cuatro de estas, en particular, son normalmente destinadas a la exportación: el Basmati 370, el Tipo 3, el K. Local y el Pusa-Basmati 1.
Aunque se diferencian internamente, las variedades mencionadas se parecen entre sí: el grano más corto se registra en el Tipo 3, mientras que la planta más productiva entre las cuatro mencionadas resulta ser la última. Además, la penúltima variante logra absorber una cantidad de agua ligeramente mayor, mientras tiene el contenido de amilopectina más bajo; una tabla de características básicas resume sin embargo los estándares mínimos requeridos para que una calidad de arroz pueda definirse como Basmati.
Fijar estas características es necesario para evitar la aplicación de un valor comercial más elevado a simples variantes de arroz de grano largo, que no deben considerarse automáticamente como pertenecientes a la variedad Basmati.
Cultivar este arroz no es fácil, especialmente en presencia de determinados insectos que lo consumen: entre estos, encontramos dos pequeñas polillas (Sciropophaga incertuals y Cnaphalocrocis medinalis) y un homóptero (Nilaparvata lugens). Los desafíos en la producción y la considerable demanda global son dos factores adicionales a tener en cuenta al atribuir un valor económico a este arroz: un buen risotto, además, puede realzar aún más su valor.
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