viaje de hoy nos lleva a visitar el Castello della Sala, una finca que incluye un territorio de 600 hectáreas, un tercio cultivado con viñedos, junto con Massimiliano Pasquini, administrador de la finca desde 2008. Con orígenes del siglo XIV, la mansión se encuentra a unos dieciocho kilómetros de la ciudad de Orvieto, una tierra de vinos blancos que se redescubren aquí y se mezclan con variedades internacionales: por eso encontramos el Procanico y el Grechetto, pero también los atemporales Chardonnay, Pinot Blanc, Viognier y otros tipos de uvas, plantadas entre 220 y
470 m sobre el nivel del mar.Estamos en las afueras de la ciudad de Ficulle, en una fortaleza fortificada que es propiedad de la familia Antinori desde 1940. Algunos de los interiores, como la famosa capilla del siglo XV, están pintados con frescos y dan testimonio del largo pasado de esta tierra: este último se basa en la elección de las mezclas para el vino de
la finca.
Desde finales de la década de 1960, la familia Antinori comenzó a introducir uvas internacionales para crear etiquetas como San Giovanni della Sala (Orvieto Classico), Muffato (un vino dulce), Cervaro della Sala, Bramito, Conte della Vipera y el único vino tinto del castillo,
El primer vino al que nos acercaremos será el San Giovanni della Sala, en la cosecha de 2021. Este vino toma su nombre de la iglesia de San Giovanni que se encuentra dentro de la fortificación y es el primero que produce la finca: la cosecha de 2021 es la última disponible en el mercado, con una crianza de cuatro meses en botella. Producimos aproximadamente 100 000 botellas, este año con un 15% de grechetto, un 25% de brocanico, un 15% de viognier, que madura muy bien aquí y aporta notas aromáticas a la mezcla y, por último, un 10% de Pinot Blanc, que aumenta la duración del
sabor.Yo diría que es muy moderno, está bien definido por la familia Antinori. Un estilo en el que haya una referencia al Orvieto Classico, pero con un toque de innovación, para un vino que no sea demasiado fuerte ni musculoso, sino elegante, vertical y equilibrado entre aroma,
cuerpo y acidez.
San Giovanni es un vino para estar «listo para beber», por así decirlo, listo un año después de la cosecha. Su mejor expresión es en el período juvenil, aunque se mantenga de 2 a 3 años
El próximo vino que probaremos será un Cervaro della Sala del 2020, probablemente el vino que más atención reciba desde la producción hasta la comercialización. Nacido en 1985, este vino es una mezcla de dos uvas, Chardonnay (fermentado en barricas con fermentación alcohólica, seguido de fermentación maloláctica) y Grechetto (fermentado exclusivamente con fermentación alcohólica, en acero inoxidable). Obviamente, todas las uvas son nuestras
.
Los porcentajes de las dos uvas pueden cambiar de un año a otro. Por ejemplo, en 2020 utilizamos un 88% de chardonnay y un 12 de grechetto, que normalmente se añade en mayor medida en los años más cálidos (como 2017), cuando se necesita acidez. En cosechas más frías, como 2014 o 2019, utilizamos menos
Sí, también hemos intentado hacer botellas de Chardonnay puro, pero preferimos dar personalidad al vino y respetar el terroir de este magnífico lugar, que lo invitamos a visitar.
Por nuestra parte, lo invitamos a escuchar la entrevista y a sumergirse en el ambiente del Castello della Sala, preferiblemente en compañía de una buena copa de vino. Salud y... ¡Hasta el próximo episodio
Para ponerse al día con los episodios anteriores de The Italian Wine Podcast, puede empezar con Epokale, el vino de 100 puntos de la bodega Tramin
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