En un mundo cada vez más consciente de la salud y el medio ambiente, las algas se proponen como una solución innovadora para satisfacer las necesidades nutricionales sin comprometer el planeta.
Las investigaciones de la Universidad de Exeter destacan que las algas, en particular la Espirulina y la Clorella, son ricas en proteínas.
La alimentación que sustituye la carne por algas también contribuye a reducir el impacto ambiental derivado de la producción de carne.
Disminuyendo la producción de carne también disminuiría el impacto causado por la cría de animales.
Es un alga azul, ya consumida por los aztecas, hoy se presenta como fuente de vitamina B12 y proteínas.
Los expertos, con experimentos en adultos sanos, han demostrado que la ingesta de proteínas de algas puede mejorar el bienestar general.
Las investigaciones han demostrado que la ingesta regular de esta alga da apoyo al sistema inmunológico, reduce los niveles de colesterol malo y combate la fatiga.
La Espirulina, en particular, parece destacarse con efectos positivos también sobre la Clorella.
Con un perfil nutricional impresionante, esta microalga ofrece proteínas de alta calidad, grasas saludables, carbohidratos, fibra y una mezcla equilibrada de vitaminas y minerales.
Su composición la convierte en un verdadero superalimento, contribuyendo a satisfacer diversas necesidades nutricionales con un solo ingrediente.
Para aquellos que buscan fuentes proteicas alternativas, la Chlorella se presenta como una opción muy válida.
Sus proteínas contienen todos los aminoácidos esenciales, convirtiéndola en una elección completa para apoyar el crecimiento y el mantenimiento de la masa muscular.
Además, las proteínas de la Chlorella son fácilmente digeribles, garantizando una assimilación óptima para nuestro organismo.
¿Y tú probarías a integrar las algas en tu dieta?
Le recomendamos que disfrute
✔ ¡Ha añadido el producto a su carrito!