Il Bottaccio
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La cultura del aceite de oliva de altísima calidad ha sido parte de la familia Guglielmi durante varias generaciones y Luca es hoy el guardián de esta importante tradición comenzada en 1925 por el abuelo Ermelindo. Estamos en Toscana, patria del aceite, en zona montañosa, pero a pocos pasos del mar y de los célebres cipreses de Bolgheri: es aquí donde se encuentra Il Bottaccio con sus olivos y el molino. Un lugar apreciado en todo el mundo por sus vinos, el clima, la belleza de las suaves colinas adornadas con olivos centenarios y capaz de producir un aceite virgen extra digno de mención.
La empresa Il Bottaccio está compuesta por 30 hectáreas de olivos, en parte centenarios, distribuidos entre la zona de Venturina Terme y Monterotondo Marittimo con una variación de altitud de 50 a 100 metros sobre el nivel del mar. Es en esta área geográfica específica que, gracias a las características climáticas, al tipo de suelo, a la influencia de los vientos y a la presencia de aguas termales que fluyen en el subsuelo, se obtienen esos frutos preciados y sabrosos de los cuales se extrae el aceite EVO de Il Bottaccio.
Gracias a la pasión por el cultivo, la recolección y la producción transmitida de generación en generación, el Bottaccio mira hacia el desarrollo de una moderna agricultura Biológica, en el signo de la continuidad de una actividad que respete el territorio y la calidad de las tradiciones campesinas toscanas. La producción se centra en el aceite virgen extra, resultado de la selección de aceitunas de producción únicamente de la empresa. Un aceite que, por lo tanto, es expresión de la cultura toscana por las cosas buenas, garantía de trazabilidad y de excelencia absoluta.
Il Bottaccio tiene como primer objetivo empresarial la producción de solo aceite de Oliva Extra Virgen de alta calidad. Con el fin de lograr este objetivo, en las diferentes fases de la producción (cultivo, fertilización, poda, recolección, extracción, almacenamiento, embotellado y empaquetado), se realiza un escrupuloso monitoreo, para que el aceite virgen extra mantenga inalteradas sus características peculiares durante toda la cadena de producción. Sistemas de riego en los olivos, poda anual de las plantas, recolección manual o semi-manual de las aceitunas, tiempos de trituración no superiores a 8 horas desde la recolección y extracción en frío son algunos de los puntos fundamentales y necesarios para garantizar un aceite de alta calidad.
Las intervenciones relativas a los diferentes momentos productivos se llevan a cabo en todas las estaciones del año de manera que, desde la primavera hasta el invierno, la familia Guglielmi cuida de las plantas para favorecer su nacimiento, crecimiento y recolección de los frutos.
Con el fin de obtener un aceite de excelencia tanto por las particulares técnicas de cultivo como por el sabor y las características organolépticas, Il Bottaccio sigue el reglamento de la agricultura Biológica.
El objetivo es la producción de alimentos sanos y de alta calidad, absolutamente libres de sustancias químicas y de síntesis, pero también a la salvaguarda del medio ambiente, al mantenimiento de la fertilidad de los terrenos y al ahorro de energía.
No se utilizan, por lo tanto, productos químicos (fertilizantes, pesticidas), sino solo fertilizantes orgánicos siguiendo un reglamento de producción específico y estricto.
El aceite EVO biológico que se obtiene contribuye a una alimentación sana libre de residuos de pesticidas, respeta el ciclo natural del olivo, contribuye a la restauración natural del ecosistema, y todo ello está sometido a controles continuos por parte de entidades certificadoras.
El respeto y la protección del medio ambiente han sido siempre una prerrogativa fundamental de la empresa Il Bottaccio. Se ha eliminado, de hecho, cualquier forma de material sintético y no reciclable en todas las fases productivas y en los propios productos finales. Il Bottaccio utiliza solo materiales de embalaje eco-compatibles, solamente papel y cartón, tapones de aluminio, botellas de vidrio y aluminio, palets de madera reciclada, papel reciclado y etiquetas biodegradables. Incluso en las oficinas, la familia Guglielmi utiliza únicamente muebles de madera, hierro, acero y vidrio; además, se utiliza energía limpia, verde, proveniente de energía renovable.
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