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Il Fruttuoso Carmelo es una microgranja ubicada en un pequeño pueblo de Molise, Gambatesa, conocido por la presencia del castillo de Capua, una elegante mansión medieval de inestimable valor artístico y arquitectónico. La empresa se encuentra a unos cientos de metros de la frontera con Puglia y tiene vistas directas al lago Occhito, un embalse artificial al que se le ha encomendado precisamente la tarea de marcar la frontera entre las dos regiones
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Il Fruttuoso Carmelo: una historia de
pasión que gana
La protagonista de este reality se llama Pasqualina Tirro, para todos Lina, que hoy produce y envasa mermeladas, jaleas y mostazas. Hasta hace unos años, Pasqualina hacía otra cosa, ser higienista dental, pero varias veces durante sus días, de camino al trabajo, pasó por la tierra de sus padres, «la Masserie del Carmine», en el monte Carmelo, para ella, un lugar restaurador para el cuerpo y el alma. Resulta que vio los árboles llenos de fruta que nunca tuvo tiempo de cosechar, pero un día decidió parar y recoger toda la fruta que pudiera. Nunca olvidaría la mirada de sorpresa de su hijo y su esposo cuando la vieron regresar con toda esa fruta. La transformó en mermelada: fue el primer paso hacia su nuevo negocio. El 16 de julio de 2013, el día dedicado a Nuestra Señora del Monte Carmelo, inauguró el primer laboratorio de Gambatesa y decidió darle a su empresa un nombre que recordara la fecundidad de las tierras familiares ubicadas en el distrito de Defenza: «
Il Fruttuoso Carmelo».
Il Fruttuoso Carmelo: artesanía natural y recetas tradicionales
La empresa se caracteriza por la producción de exquisitas mermeladas, mermeladas, mostazas y jaleas, que se pueden utilizar en la sencilla tabla de cortar embutidos y quesos, hasta en preparaciones culinarias más elaboradas. Lina, gracias a su terquedad e imaginación, ha conseguido a lo largo de los años enriquecer su producción, revisando las recetas tradicionales con frutos secos, especias y aromas, obteniendo sabores siempre originales y versátiles.
El laboratorio carece de máquinas industriales: la transformación se lleva a cabo siguiendo las técnicas tradicionales, luego se cocina a fuego lento, olla y cuchara