La Scolca

La Scolca es una de las empresas símbolo de Gavi, siempre concentrada en el Cortese, un varietal autóctono que ha contribuido a darlo a conocer en el mundo.

La Scolca: sinónimo de Gavi desde generaciones

La Tenuta fue adquirida en 1919 por el bisabuelo de Giorgio Soldati, padre de Chiara Soldati, cuarta generación que hoy dirige la empresa con la mirada ya puesta en el tercer milenio.

El pasado y el futuro conviven en esta empresa que combina lo mejor de la naturalidad de quienes viven en este mundo desde siempre con la rapidez de aquellos que mirar hacia adelante con la previsión de capitanes valientes: nunca como en el caso de la familia Soldati los nombres tienen un significado simbólico. 

El nombre del terreno proviene del antiguo topónimo “Sfurca” que significa “Mirar lejos” y la granja que allí se erguía había sido en el pasado una estación de vigilancia. El apellido refleja plenamente el carácter orgulloso y tenaz de los propietarios y sus vinos.

En el momento de la compra, la propiedad estaba en parte cubierta de bosques, en parte cultivada de trigo. Fue una intuición bien estudiada y de hecho la producción pronto se convirtió en una actividad técnica y empresarial primaria.

La Scolca es, por lo tanto, la empresa más antigua de la zona, por la continuidad de gestión por parte de la misma familia, pero al mismo tiempo es la más moderna.

Giorgio Soldati se ha demostrado ser un validísimo y ingenioso intérprete innovador: suya es la creación de vinos y espumantes de éxito sin nunca traicionar la fidelidad a la tierra de Gavi y al varietal Cortese. Pero la tarea más ardua que ha asumido, junto a la familia, ha sido mantener el liderazgo que la empresa ha conquistado a lo largo de los años, reforzando aún más la imagen y la fama de La Scolca con un deseo totalmente piemontés y la filosofía de la máxima calidad posible.

Vinos La Scolca: calidad sin tiempo

Los viñedos de La Scolca se extienden por 64 hectáreas y, entre los varios terrenos, aquel en el municipio de Rovereto podría ser definido como el "grand cru" del Cortese.

La empresa agrícola La Scolca tiene sus viñedos en las posiciones más bellas de Rovereto, y su Gavi dei Gavi representa la cúspide del vino que se produce en esta microzona. Pero este emocionante resultado no proviene exclusivamente de la afortunada posición de los viñedos, sino que es también fruto de prácticas enológicas y vitícolas particularmente afortunadas, que le permiten, en igualdad de materia prima con otros viñedos de la zona, tener una marcha más.

La técnica de vinificación en frío permite el máximo respeto por el racimo y mantiene inalteradas las cualidades de la uva y el 100% de los “precursores de los aromas” desde el momento de la prensado hasta la fermentación. Además, el sistema permite respetar el origen de las uvas provenientes de varios viñedos, de edades diferentes (5-60 años), manteniéndolos separados con un sistema computarizado de control del flujo de mostos que mantiene distintas sus fracciones y orígenes.

En las viñas La Scolca se ponen los máximos cuidados y atenciones en todo el ciclo productivo, desde la sabia poda, al despeje atentísimo, a la "poda verde", cuando sea necesario, en junio, hasta la vendimia que generalmente ocurre un poco antes que en otros productores. Desde hace algunos años, además, todo el régimen de conducción agrícola sigue los dictados de la biodinámica. Las uvas recogidas llegan a la bodega en muy poco tiempo y, tras una cuidadosa selección de los mejores racimos, comienza el verdadero trabajo en bodega. Aquí nacen sus famosos Gavi, como la Etichetta Nera. Una gran tradición de vinos blancos piemonteses.

La Scolca, gracias a su meticulosa y cuidadosa elaboración, permite obtener un vino que ha sido definido con personalidad aristocrática, mineral e intenso, persistente y elegante. Un vino reconocido y premiado también con los Awards de The Wine Hunter.